sábado, 21 de septiembre de 2024

Michel Foucault. El filósofo clarividente.

El filósofo clarividente.

Michel Foucault. Enfermedad mental y psicología. Paidós.

En la primera introducción Michel Foucault se hace dos preguntas: “¿en qué condiciones se puede hablar de enfermedad en el terreno psicológico?; y ¿qué relaciones podemos definir entre los hechos de la patología mental y los de la patología orgánica? Todas las psicopatologías se han ajustado a estos dos problemas: las psicologías heterogeneidad y las otras psicologías analíticas o fenomenológicas. ¿Qué es lo normal o lo anormal o patológico en el terreno psicológico u orgánico?, nos preguntamos. “Interpretar como la psicología normal la conciencia mórbida. Encontramos una división análoga en el gran debate sobre la psicogénesis y la organogénesis.” (…) “Más allá de la patología mental y la patología orgánica, hay una patología general y abstracta que domina a ambas… “…etiología orgánica, etiología sifilítica” “a fines del siglo XIX se definió el síndrome histérico.”

“Como la medicina orgánica, la medicina mental trató primero de descifrar la esencia de la enfermedad… constituyó pues una sintomatología: alucinaciones auditivas, delirios…” “Por otra parte, la medicina mental constituyó la nosografía” “Los trastornos mentales no tienen un motivo orgánico sino psicológico.”

El autor nos habla de la histeria, la psicastenia, manía y depresión, la paranoia, la hebefrenia y la catatonia. “Los trastornos psíquicos en dos grandes categorías: la neurosis y la psicosis.” Y yo me pregunto: ¿esta enfermedad del alma que es la patología mental tendrá su causa en la alteración del sistema nervioso? En ocasiones nos ponemos muy nerviosos. Y no hay ninguna sustancia natural que nos tranquilice. Ya de niños pasamos sueño. Viviendo las primeras situaciones de estrés. ¿Será todo esto negativo? ¿Cuándo comienza la patología mental? ¿Trauma infantil, en el primer trabajo, realizando el servicio militar? 

La psicosis alucinatoria crónica, la hebefrenia y la catatonia Kraepelin las aglomeró denominándolas: demencia precoz. Bleuler retomando esta misma nosográfica ampliando ciertas formas de la paranoia les dio el nombre de esquizofrenia.   

En la enfermedad se pierde las habilidades sociales, así como el diálogo y, el paciente es vulnerablemente arcaico ante la sociedad.

“Marguerite Sechehaye hasta logró analizar a una joven esquizofrénica a quien una fijación en esos estadios muy arcaicos de desarrollo le había provocado, en el momento de la adolescencia, un estado de estupor hebefrénico en el que la joven vivía, abatida, en la conciencia angustiosamente difusa de su cuerpo hambriento.” (Pág. 34) 

Los fenómenos de regresión individual o social descritos por Freud o por Janet podríamos resumirlos en las siguientes líneas: el desequilibrio y las neurosis, la paranoia, estados oniroides, estados maniacos y melancólicos, estados de confusión y esquizofrénicos y la demencia. El análisis como hecho patológico: descuida la organización de las personalidades mórbidas en las que se manifiestan estructuras regresivas y el análisis regresivo describe la orientación de la enfermedad sin desenmarañar el punto de origen.

La complicación nodal no encuentra respuesta, mientras en la aurora de la psique se repetirá un universo de miles de amenazas neuróticas. “El mecanismo patológico es, pues, protección contra un conflicto, defensa frente a la contradicción que ese conflicto suscita”, (pág. 58)

El autor, en su segunda introducción nos dice que los análisis antecedentes han fijado las líneas que permiten a las psicologías situar el hecho patológico. Hace poco tiempo que en Occidente la locura ha tenido estatus de enfermedad mental.

Hay que ser comprensivos yendo más allá traspasando las fronteras de lo normal para llegar a la esencia de lo patológico. El loco es un error evitable si no falla el doctor, la familia y la medicación. Pero aquí Michel Foucault no nos habla de farmacología.

La psicología jamás podrá someter a la locura. ¿Podrá una persona aquejada de una patología mental sanarse casi en su totalidad, pues la enfermedad duerme en su mente hasta el próximo brote psicótico? ¿Un enfermo mental puede ser perseguido por la mafia, tener razón él y no ser un tópico equivocado? ¿Debería investigar el facultativo después de escuchar a su paciente? El doctor debe saber toda la verdad de quien tiene que sanar si es posible. ¿Llegará a ser la enfermedad mental reversible?

Mientras el paciente que está en peligro se dice a sí mismo: No querer caer en la trampa, la amenaza se cierne cada madrugada, no sé lo que es un delirio, si es verdad o mentira, lo vivo como real, ¿y la alucinación, y las voces?, tengo miedo por el amor, las amistades desertan, no se puede controlar la vida, se busca la solución en la muerte, llenaré mis bolsillos de piedras y me adentraré en el río si no amanece un día nuevo claro, rutilante, lleno de paz, prisionero el sufrimiento y domesticado.

Michel Foucault no ve arcaico el punto de partida cuando se comenzó a estudiar la patología mental. Es correcto la diferencia entre medicina mental y medicina orgánica. Leyendo el libro llegué a conocer la curación de la enfermedad mental como la esquizofrenia en una paciente. ¿Se estará haciendo algo mal en la psiquiatría en nuestros días? ¿Antaño u ogaño? ¿Cuándo es o ha sido mejor para resolver la enfermedad mental? No busco polémica. Más bien un consejo. Y lo repito. Ante el problema de salud mental en una persona hay tres pilares fundamentales que tienen que ser muy responsables: el doctor, la familia y el paciente. Que falle el facultativo con la medicación, la familia no colabore y el paciente haga caso omiso, la sanación no se cumpliría. El error del médico, la ignorancia y egoísmo de la familia y el paciente inocentemente que no sabe lo que ocurre, todo esto, es un arma de doble filo. El diagnóstico de la patología mental debe y tiene que ser precoz.

Dos fechas: 1936 Egas Moniz practica las primeras lobotomías. 1938 Cerletti comienza a aplicar el electroshock.

“Si nos cuesta tanto definir la enfermedad y la salud psicológicas. ¿no será porque nos esforzamos en vano en aplicarles masivamente conceptos destinados también a la medicina somática?”

“La psicología solo fue posible en nuestro mundo una vez que pudo controlarse la locura.”

Michel Foucault



martes, 17 de septiembre de 2024

El latín como lengua de cultura

 El latín como lengua de cultura

Algunas de las principales causas:

Sintaxis oracional: del latín arcaico al clásico se potencia, con el uso y matices de las partículas subordinantes.

La disciplina jurídica como protagonista en la vida social y política. El derecho exige enunciaciones claras y precisas y en Roma arranca con la “Ley de las doce tablas”, cuya redacción podría haber sido hacia la mitad del siglo V a. C. La creación de un corpus jurídico latino que se prolongó durante todo el Imperio.

En la Republica la libertad política dio lugar a que la palabra adquiriera una importancia determinante en las decisiones, la oratoria (elaboración de discursos) y la retórica (la codificación teórica de criterios de la elaboración de discursos) fomentó una lengua con finalidad persuasivos, cuyo culmen en la época clásica lo representa Cicerón.

Un lenguaje abstracto rico en matices fue sobre todo gracias a los tres adaptadores de la filosofía griega: Lucrecio con la doctrina epicúrea en un poema en hexámetros (De la naturaleza de las cosas); Cicerón creando una prosa filosófica latina acuñando terminología de los géneros literarios más aptos (diálogos, tratados); y Séneca en la época imperial plasma su reflexión de inspiración estoica con su colección de diálogos y cartas a Lucilio.

La literatura latina imita y emula creativamente el modelo griego. Los poetas de la época clásica aprenden y estiman a los autores arcaicos (Ennio, Nevio); Cicerón le interesa la prosa de Catón, intentando superarla con los presupuestos estoicos; después Séneca reacciona frente a la prosa de Cicerón; Catulo quiere emular la poesía alejandrina de Calímaco siguiendo la estela de los poetae noui latinos; Horacio sigue más de cerca la poesía de Arquíloco que guarda ecos de la poesía de Catulo, tomando un camino diferente; Virgilio sin perder la antigua épica homérica, integra en la Eneida una gran variedad de recursos, temas y formas literarias de la poesía latina anterior.


sábado, 14 de septiembre de 2024

George Whitman.

 

George Whitman

Nace naturalmente en lo alto

un río llamado Sena

que a la ciudad de París decora.

El gran Shakespeare fue el inicio

y la librería Shakespeare and Company

capitaneada por George Whitman

es continuación

de palabras vivas plasmadas en algunos libros

de hace ya siglos.

Amistad verdadera decorada en las paredes

de Shakespeare and company.

Amistad viva certeramente,

habitan en la librería sentimiento y sueño,

volviendo algunos de los que no se fueron para siempre.

No existe ley alguna

y si existiera

su nombre seria: bohemia.

La excentricidad de George Whitman

para mí es original,

como el manantial del río Sena

o la inspiración del diseño y construcción

de la Catedral de Notre – Dame,

o su corte de pelo con llama de fuego de una vela.

Viajaste por el mundo

con un mapa en tus manos con anotaciones

de versos de Federico García Lorca.

Principios, valores y moral de libertad

en la librería Shakespeare and Company

son escuela,

son tus hechos,

tu hija es fruto no solo del amor

sino también de la literatura.

Tu corazón pintado tras el paso de la vida

han percibido generación tras generación

como si de un bello lienzo se tratara.

George Whitman 

de tu librería emana

el florecer de una amistad incondicional.

Nadie olvidará París,

nadie olvidará el río Sena,

nadie olvidará la Catedral de Notre – Dame.

Y naturalmente se recordará

un nombre: George Whitman.

 


viernes, 13 de septiembre de 2024

Nacimiento del cristianismo en el Imperio Romano

 

 

Nacimiento del cristianismo en el Imperio Romano.

De los distintos grupos religiosos procedentes de la cuenca oriental del Mediterráneo hallamos a los judíos, herederos de la tribu de Juda y creyentes de una religión fundada en un texto sagrado, recogido en el Antiguo Testamento de la Biblia que amparaba un monoteísmo trascendente alejado del politeísmo oficial. Fueron aliados del pueblo romano desde las guerras contra los Seléucidas siglo II a. C., tolerando su culto durante los primeros tiempos de la autoridad romana. Las relaciones entre judíos y romanos se deterioraron. Con la incorporación de Judea como provincia romana en el 6 d. C., dando inicio a severas persecuciones por parte de emperadores romanos.

Los textos literarios latinos muestran una imagen de los judíos que ponen de manifiesto el rechazo de sus costumbres y creencias por parte de los romanos de formación pagana. Tácito advierte el riesgo que supone para la estabilidad de la mentalidad romana.

Aunque un grupo de judíos asumió la doctrina del Nuevo Testamento creyendo en Jesús desligándose del judaísmo primitivo tradicional. Son los designados cristianos, considerados por los romanos como una mera secta judía. Existió una hostilidad mutua entre los judíos tradicionales y los cristianos. Nerón culpó a los cristianos del causante incendio de Roma de 64 d. C., por ello fueron perseguidos los cristianos durante dos siglos.

Los cristianos fundaron pequeñas comunidades durante I al III d. C., primariamente en el norte de África de donde provienen los primeros padres: Tertuliano o Cipriano y ya en el siglo IV Agustín de Hipona, en la península itálica y el resto de la cuenca occidental del Mediterráneo, primero con hablantes del griego y más tarde con los latinos.

La disposición doctrinal del cristianismo occidental latino fue a fuego lento con una compleja exégesis e interpretación de los textos bíblicos gracias a la obra de los Padres de la Iglesia que rechazaban la cultura pagana de los primeros tiempos a la aceptación de muchos elementos de esta como instrumento para la formación del pensamiento cristiano. Se desarrolla entre el II d. C. con Tertuliano, hasta los siglos IV – V con Agustín de Hipona y Jerónimo. El cristianismo no es oficial hasta la redacción de la Vulgata por Jerónimo, encargada por el Papa Dámaso a comienzos del siglo V. Hubo tensión entre los cristianos y los paganos.

El protagonista del último intento de acabar con el cristianismo fue Diocleciano en el 303. Por lo que debido a esta persecución abdicó en el 305, esto ocurría en occidente, mientras que, en oriente en el 311, Galerio toleró la religión.

La persecución del cristianismo en el Imperio culmina rigiendo el gobierno Constantino instaurando la libertad de cultos. En el Edicto de Milán decretado el 313 se otorga la libertad religiosa a los cristianos y en el 325, en el congreso de Nicea, se zanjó que el cristianismo pasara a ser la religión oficial del Imperio.

Juliano (360 – 363) quiso instaurar el paganismo, pero su esfuerzo quedó en vano y el emperador Teodosio I (378 – 395) implantó el cristianismo como la religión del Imperio.

Francisco José Blas Sánchez, poeta y escritor.


lunes, 9 de septiembre de 2024

Ilaria Tuti. Flores sobre el infierno.


 

Flores sobre el infierno (2019) Es un thriller noir en femenino que te mantiene en vilo. Narración culta. Poco lenguaje hosco. Muy adictivo. En sus descripciones es bucólica. Hay cabida a la poesía. La protagonista, la comisaria Teresa Battaglia es una veterana perfiladora de criminales, muy astuta, humana, y está en su peor momento vital. Le acompaña el joven inspector Massimo Marini.

La comisaria nos revela su sabiduría: “(Los ojos de la víctima) Son el espejo del alma, dicen. Algo cierto debe de haber, cuando los asesinos tan a menudo se los cubren a las víctimas para no sentirse juzgados, para que su propósito de matar no disminuya”. (pág. 46)

Evoca con nostalgia las cosas sencillas y la ansiada felicidad: “Cerró la puerta tras de sí, se liberó del bolso en bandolera y se descalzó en dos patadas. La calidez de la madera bajo los pies le recordó que eran las cosas sencillas las que daban alivio al alma, como cuando siendo niña corría descalza entre los viñedos, en verano, levantando polvo y risas. Aún podía sentir el aroma mineral de la tierra tostada por el sol, de las piedras salinas, la acidez de las parvas verdes y el dulce de las acacias en flor. El sudor, las flores amargas del diente de león, las gotas de vino en los labios, robadas del vaso del abuelo. La sustancia de la felicidad”. (pág. 71)

La autora nos habla de la importancia de la familia y su ayuda y la capacidad de superar el sufrimiento como Aquel que se dio hasta el extremo: “Diego entendería que su familia – la que él había elegido – estaba de su lado, dispuesta a conllevar una parte de su dolor, como había hecho Jesús en la cruz”. (pág. 82)

Asistimos al carácter duro de Teresa: “Pensé que habías huido del final de un amor – dijo-. Pero me equivocaba, ¿verdad? Tú búsqueda de la perfección y el modo en que mendigas mi reconocimiento me hace pensar más en un padre demasiado invasivo y exigente, incluso ahora que ya te has hecho hombre. Una figura incomoda, ¿Tu padre?” (pág. 86)

La comisaria hace gala de su sabiduría:

“Teresa empezaba a encontrarlo divertido.

-El único que intenta adivinar eres tú, a juzgar por lo que he leído – dijo. Se inclinó hacia él-: La criminología no es una ciencia exacta, cierto. No hay nada matemático y cada caso es singular. La criminología es un arte. El arte de aprender a observar atentamente cosas que alguien como tú ni siquiera es capaz de ver. Pero no es magia: es interpretación. Es probabilidad, estadística. Nunca certeza. (pág. 88)  

El miedo, a menudo, supone la diferencia entre vivir y morir. (pág. 183)

 

Leer a Ilaria Tuti no es desagradable y te hace pensar por qué el criminal hace lo que hace.

Narrativa Internacional. Traducción de Xavier González Rovira.

Esta es la trilogía que Ilaria Tuti ha escrito: Flores sobre el infierno (2019) La virgen negra (2021) Hija de las cenizas (2023)

 

domingo, 1 de septiembre de 2024

El Reino de los Cielos (Capítulo 23, fragmento)

23

“La vida es lo más grande: perderla es perder todo”, Bertolt Brecht.

La noche es mística. Nos envuelve en su misticismo. El poeta en la noche se embelesa y entra en arrobamiento. Algo así conseguía sentir Liberto. Quería llegar a ser más espiritual, no veía obstáculos para ello, en secreto anhelaba ser un gran místico, un gran asceta, sin embargo, sabía que era una tarea difícil.  Aunque la vida es muy traicionera, también es generosa. Él pensaba que Dios ha hablado a las distintas culturas y religiones que hay en el mundo. Meditaba sobre algo que escuchó en labios de Agatha sobre Confucio: “La riqueza y la reputación son dones del Cielo”. ¿Un Dios bueno quiere de verdad la pobreza y que personas mueran de hambre? La respuesta definitiva es que no. Dios es completamente inocente. La vida se pierde cuando dejas de pensar en Dios, cuando no te importa el prójimo y cuando te traicionas a ti mismo. Liberto sabía que Jesucristo era la verdad, nuestro camino de vida. La vida es la gran aventura. José, el escritor, era quien más amaba la vida, estaba enamorado de ella. Este era buen conversador al estilo de Sócrates. Todos ellos habían estudiado y debatían en tertulias amistosas que: “Sócrates representa el pensar que está-en-camino combinado con el saber del no-saber.” Leían de todo y lo argumentaban. Ellos admiraban y no idolatraban. 

Leyendo: Estación Damasco. David McCloskey.

  El  thriller  más atractivo y refrescante del año. «La mejor novela de espionaje que he leído nunca». General David Petraeus, ex director ...